

Foto del Maestre Dr.José Manuel Estrada
que si mi memoria no me falla dijo que era nativo de Barquisimeto. Oímos la conferencia con mucho interés, pues el tema fue muy interesante y versaba sobre los orígenes de la Gran Fraternidad Universal, el Dr. Estrada narró cómo esa especie de Logia cuyo fin primordial es expandir el nuevo conocimiento sobre la Humanidad y el cristianismo que debía renovarse, según él, por la llegada de la Era de Acuario. La cuestión es que que el objetivo final era fundar en la ciudad La Gran fraternidad Universal bajo el signo del Sol, o algo así, que se diferenciaba de una que estaba bajo el signo de la Luna. Como se podrán imaginar, nuestras mentes casi explotaban con tantos términos nuevos y conceptos que jamás habíamos oído. Al final de la charla invitó a todos los asistentes a participar en una reunión para el domingo siguiente, señalando la dirección y la hora. Armando y yo asistimos a esa reunión, que fue en una casa cercana a la avenida Los Abogados de Barquisimeto, esa mañana conversamos sobre todas las expectativas que teníamos con la reunión.
Al llegar nos encontramos con el Maestre Estrada, que sin duda alguna era un personaje de novela, vestido con una toga blanca semejante a la que tiene en la foto, y su aspecto era exactamente igual, a Armando y a mí nos daba la sensación de estar ante un hombre santo y sabio. Bueno, él nos invitó a pasar con una sonrisa amable y espontánea, nos observaba detenidamente con una mirada complacida y que notaba alegría, realmente nos sentimos muy cómodos con él. Había muy poca gente en la salita de la casa, que era muy modesta y sencilla, todo estaba dispuesto para que la gente se acomodara lo mejor posible.
El Maestro nos presentó a su esposa, creo que era una señora mexicana por su acento, la sede principal de esta Gran fraternidad se encuentra en México,( más información sobre la misma la pueden encontrar en su página Web), inmediatamente nos invitó a ponernos de pie y tomarnos de la mano para rezar, según él, como lo hacían los cristianos primitivos (originarios), recuerdo que sacó una especie de cajón de madera de color blanco en donde acomodó de manera de altar unas imágenes de Cristo, y otros objetos que no recuerdo bien, pero que le daban un carácter místico a todo aquel ritual.
Armando y yo nos mirábamos sorprendidos con todo aquella parafernalia que luego, el Maestro explicó fue heredada de quién fue el fundador de la Gran fraternidad Universal, el Dr. Serge Raynaud de La Ferriere, mostrándonos por primera vez la foto del susodicho, cuando la vimos nos sorprendimos por el parecido a Jesús, cuestión que el Dr. Estrada supo manejar muy adecuadamente. Nos dijo que La Ferrier había desaparecido sin dejar huella y que era un hombre con el más alto grado de conocimiento
en cuanto a Yoga y demás ciencias esotéricas,

Foto del Gran Maestre Dr.Serge Raynaud La Ferriere
Nos dijo que La ferrier hablaba perfectamente 9 idiomas, incluyendo las lenguas muertas del Latín , el Sánscrito y Arameo. Amén de ser experto en cuestiones de la mente, y teólogo. En fin un personaje casi sobrenatural y que él lo había tratado lo suficiente para ser su discípulo y heredero de sus enseñanzas, dejándole la misión de iniciar la expansión de esos conocimientos a los escogidos por las fuerzas del universo y de Dios mismo para tan delicado e importante proyecto, cuyo fin es preparar la nueva humanidad para los cambios que habrían de venir. Con ese discurso, de lo cual me recuerdo lo más importante, me dispuse a aceptar pertenecer a la fundación de la organización,
Armando también se dispuso y levantamos los brazos en señal de aceptación.
El Dr. Estrada nos agradeció nuestra intención pero nos dijo que teníamos que esperar que él elaborara la carta astral de cada uno de los que estábamos allí para darnos el sí definitivo e indicarnos que papel íbamos a desempeñar dentro de la misma. Bueno, todos nos fuimos retirando, pero cuando ya quedaban pocas personas el Dr. Estrada nos llamó para enseñarnos de cerca una foto, creo que la original de la misma que estoy publicando aquí del Dr. La ferriere, y otra de él en donde aparece con el aúrea de su cabeza como la que le pintan a los santos en las pinturas antiguas, nos explicó que la foto se la habían tomado en Francia, si mi memoria no me falla. En fin, salimos de allí con una espiritualidad inusual en nosotros, esperando que nos llamaran.
Pasaron unas semanas, yo creí que no había calificado, me imaginaba que por lo jóvenes que éramos. En aquél tiempo vivíamos en una casa de la Av.Lara que era muy grande y de la puerta principal a la de la calle en donde estaba el muro habrían unos seis u ocho metros de distancia, de manera que para abrir la puerta uno tardaba algo y las personas debían esperar unos minutos. La cuestión es que un día, creo que sábado, porque mi papá estaba en la casa, tocaron el timbre varias veces, yo estaba ocupado en el jardín trasero de la casa jugando con mi perro King y no oí el timbre, mi papá, que nunca habría la puerta, salió molesto al ver que ninguno fue a ver quien tocaba, cuando llegó y abrió la puerta se encontró con un comité de personas presidida nada más y nada menos que del Dr. Estrada, con su vestimenta típica de Maestro que impresionaba, al poco tiempo me percaté de la presencia de los mismos por mi perro que comenzó a ladrarme como para que lo siguiera (era muy inteligente), caminé presuroso y logré ver al Dr. Estrada de lejos pero él no logró verme puesto que mi papá prácticamente los despachó sin muchos preámbulos y no me imaginaba porqué.
Cuando fui rápido para seguirlos mi papá me atajó y me llamó con voz de pocos amigos, me dijo que a dóde había conocido a esos extraños hippies, que le habían dicho que eran de una tal Fraternidad Universal y que yo había sido seleccionado como tesorero de la organización por los datos que obtuvieron de mi carta astral, en donde indicaba que yo tenía aptitudes para ese tipo de funciones. Bueno, no quiero ni contarles lo que me dijo mi papá al respecto, me prohibió que fuera con ellos porque él no se iba a ser responsable si allí se perdía dinero y que sé yo cuántas cosas, la verdad es que esa parte me la borré de mi memoria por lo desagradable que fue. Allí terminó mi carrera sin haber comenzado en esa organización que al parecer es una de las más serias en cuanto a formación en las ciencias esoterícas y yoga. No me acuerdo si a Armando le ofrecieron algún cargo. Desde ese momento decidí mantener en secreto todas mis actividades que tuvieran que ver con estos asuntos, para poder vivir en santa paz con mi familia, después de todo era un adolescente con muchas preguntas que responder.
A los meses, Armando me llamó por teléfono: -Alí, van a dar un curso sobre OVNIS en la biblioteca Pío Tamayo, un tal Ing. Enrique Castillo Rincón., la inscripción es de 30 bolívares por tres días. - Ok- Le contesté- nos vemos en tu casa esta tarde para ir juntos a inscribirnos.
Aquí comienza otra historia que es para el próximo capítulo.
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